Entradas populares

sábado, 3 de diciembre de 2011

EN ESTO PENSAD -- DICIEMBRE 2011

ASPIRE A SER COMO JESÚS

William MacDonald

La respuesta a la mayoría de los problemas que enfrentamos es la santidad o la semejanza a Cristo. Por ejemplo, uno de nuestros problemas es cómo conocer la voluntad de Dios. La mayoría de los versículos que responden a esa interrogante tienen que ver con nuestro carácter (Pr. 3:5-6; Sal. 25:9). Queremos saber cómo ser efectivos en la evangelización. La respuesta es la santidad (Mt. 4:19).
Si queremos tener una vida eficaz de oración el Señor dice: "Sí permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho" (Jn. 15:7). Como soldados que luchan por el señor, necesitamos protección y eficacia. ¿Cómo? La armadura del creyenbte se encuentra en Efesios 6:11-18. Es el carácter cristiano. Lo mismo sucede en todos los aspectos de la vida cristiana. Dios no nos da una atractiva lista de diez principios. En lugar de eso enfatiza nuestra vida personal. Lo demás viene solo.
Siempre deberíamos orar: "Señor, haznos cada vez más como Cristo y cada vez menos como nosotros mismos". Ningún cristiano argumentaría en contra del hecho que deberíamos ser cada vez más como el Señor Jesús. No existe una meta superior ni una ambición más elevada que ser semejante a Cristo. Uno de los grandes objetivos de Dios para Su pueblo es conformarlos a la imagen de Su Hijo. El propósito de Dios es hacernos como el Señor Jesús. Se enseña a lo largo del Nuevo Tetamento y a menudo lo escuchamos en los sermones.
Pero aun existe una pregunta: "¿Cómo?" Es una forma práctica y en nuestra vida cotidiana, ¿cómo podemos hacer para que Dios logre una sejejanza cada vez mayor al Señor Jesús en nuestras vidas? Una cosa es saber qué hacer y otra es cómo implementarlo.
"La imagen de Dios no se la ve en la forma de nuestros cuerpos, sino en la belleza de una mente y un corazón renovados. La santidad, el amor, la humildad, la mansedumbre, la bondad, el perdón, todas estas cosas constituyen el carácter divino" (Notas Diarias de Scripture Union).
Pablo nos dice que somos transformados a Su imagen a medida que lo contemplamos (2 Co. 3.18) Esto significa que si estudiamos Su vida como Hombre aquí en la tierra, y también Su vida presente a la diestra de Dios, y luego con disciplina y determinación procuraremos seguirle, caminr como Él caminó y ser conducidos por Su ejemplo.
Existen dos versículos claros en el Nuevo Testamento en los cuales el Señor Jesús es presentado como ejemplo para que lo sigamos. Ellos son Juan Juan 13:15 y 1 Pedro 2:21. 
"Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis" (Juan 13:15, acababa de lavar sus pies). También 1 Pedro 2:21 dice: "Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis Sus pisadas".
Está por demás decir que nunca podremos alcanzar Su perfección aquí o compartir atributos que pertenecen únicamente a Dios. Pero no deberíamos usar esto como una excusa para quedarnos satisfechos con el status quo (las cosas como son ahora). Deberíamos luchar para alcanzar la meta.
continuará, d.v.  en el próximo número

de su libro El Manual del Discipulo, págs 95-96, traducción corregida

- - - - - - - - - - - -  - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

Píldoras Antipentecostales
         (parte II)

Píldoras para combatir la doctrina falsa sobre la persona y obra del Espíritu Santo de Dios: 

· El bautismo del Espíritu es mencionado tres veces:
El (Cristo) os bautizará en Espíritu Santo; Lucas 3.16. 
Vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de pocos días; Hechos 1.5. 
Por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo; 
1 Corintios 12.13 . 
(Este bautismo es la operación del Espíritu por la cual se formó unavez para siempre el cuerpo espiritual que es la Iglesia universal). 
· Esta operación se realizó el Día de Pentecostés y no se repite. Cada creyente desde su conversión es miembro de este “cuerpo”, la Iglesia universal o total. 
· La Escritura nunca habla de un individuo como bautizado por el Espíritu. 
· Al recibir el Espíritu los creyentes fueron “llenos”, Hechos 2.4. Esta plenitud debe ser mantenida: Sed llenos del Espíritu— 
(i) hablando entre vosotros, 
(ii) cantando, 
(iii) alabando en vuestros corazones, 
(iv) dando gracias. Colosenses 3.16

· La plenitud del Espíritu se mantiene por la meditación de la Palabra: 
"La palabra de Cristo more en vosotros... enseñándonos, exhortándonos, cantando..." Efesios 5.19
·El don del Espíritu se recibe en el mismo momento y de la misma manera que el perdón; véanse Hechos 2.38, 10.43 al 48; 11.15 al 18.  Después de Pentecostés el Espíritu mora en todos los creyentes; véase Romanos 8.9, “Si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él”.

Píldoras para combatir exageraciones acerca del antiguo don de sanidades públicas

· Los apóstoles y sus colaboradores (Esteban, Felipe y Bernabé) sanaron a los enfermos, pero ningún otro hacía sanidades; Hechos 6.8, 8.6,7,13, 14.3 
· Cuando éstos sanaban, nunca fracasaron. La curación fue siempre completa e instantánea. No se usaba como propaganda. No sanaron a creyentes. 
· Las sanidades fueron señales para acreditar el evangelio; no eran un fin en sí; Hebreos 2.3,4, Marcos 16.14 al 20. 
· Estas señales iban a “seguir” a los apóstoles, una vez vencida la incredulidad mencionada en Marcos 16.11 al 14, para fortalecer su fe y mostrar al pagano que proclamaban la verdad; no dice el Señor que los convertidos tendrían esta capacidad. 
· Una vez acreditado el evangelio, las curaciones cesaron. Ejemplos: la enfermedad de Timoteo, 1 Timoteo 5.23, y la de Trófimo, 2 Timoteo 4.20.

H. W. Graham; adaptado de La Sana Doctrina, número 51, 1967, y presentado en Tesoro Digital

- - - - - - - - - - - -  - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

El Purgatorio y el Paganismo

Si bien no se encuentra en la Santa Biblia el dogma del purgatorio, podemos reconocer su origen recordando que era una creencia común entre las religiones paganas. Platón, hablando del juicio futuro de los muertos, afirma que "de aquellos que han sido juzgados, algunos deben primeramente ir a un lugar de castigo donde deben sufrir la pena que han merecido...
Esta doctrina resultaba muy provechosa para los sacerdotes paganos, porque era la base de sufragios piadosos por los difuntos.
Platón habla de "un misterio y el más costoso de todos los sacrificios, llamado el Telete, que era ofrecido por los vivos y los muertos para librarles de todos los males a que los malignos están expuestos al abandonar este mundo" (Phaedrus, por Platón. Tomo II, págs. 364-365).
Tales eran las ideas de los paganos a los cuales fue predicada la doctrina cristiana. No es extraño que algunos cristianos, imbuidos de estos pensamientos, al aceptar la nueva fe empezaran a orar por sus difuntos y a recomendar esta clase de oraciones, pero no sin tener la oposicioón de muchos cristianos piadosos que condenaban totalmente el orar por los que, según la Escritura: "Descansan de sus trabajos". Los que, inclinados un poco hacia aquella creencia, como san Agustín, oraban por sus difuntos, era siempre con duda y como medida de precaución, teniendo que reconocer, sin embargo, que no podían encontrar en las Sagradas Escrituras una clara enseñanza de dicha doctrina. 
El dogma del purgatorio, en sus principios, fue condenado en el concilio general celebrado en Constantinopla en el año 573, y no fue aceptado como tal hasta el concilio de Florencia en 1439.

Samuel Vila, de su libro A LAS FUENTES DEL CRISTIANISMO (CLIE), pags. 51-52

- - - - - - - - - - - -  - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

¿Has guardado los Diez Mandamientos?

1.  “No tendrás dioses ajenos delante de mí”.
2.  “No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás”.
3.  “No tomarás el nombre del SEÑOR tu Dios en vano”.
4.   “Acuérdate del día de reposo para santificarlo”.
5.  “Honra a tu padre y a tu madre”.
6.  “No matarás”.
7.  “No cometerás adulterio”.
8.  “No hurtarás”.
9.   “No hablarás contra tu prójimo falso testimonio”. (no mentirás)
10.  “No codiciarás... cosa alguna de tu prójimo”.    Éxodo 20:3-17

Se acerca el día cuando todo ser humano comparecerá ante Dios. Amigo, ¿cómo te irá aquel día? Veamos: ¿Has mentido alguna vez? ¿Has tomado algo que no era tuyo? ¿Has tomado en vano el nombre de Dios? Cristo dijo: “cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón” (S. Mateo 5:28). ¿Has mirado con codicia o lujuria? ¿Serás hallado culpable en el día del juicio? Si has hecho  cosas así, Dios te ve como mentiroso, ladrón, blasfemo y adúltero de corazón. En el juicio serás hallado como eres: pecador culpable, y serás condenado. “El alma que pecare, esa morirá” (Ezequiel 18:4). La Biblia te advierte de que si eres culpable acabarás en el infierno por toda la eternidad. Y las palabras de Cristo nos implican a todos: “Ninguno hay bueno, sino sólo Dios?” (S. Lucas 18:19).
Pero esa no es la voluntad de Dios, ni siquiera para los pecadores. Dios conoce nuestra maldad, pero aun nos ama y desea perdonarnos. Pero el perdón divino no es cuestión de meras palabras. “La paga del pecado es muerte” (Romanos 6:23). Alguien tiene que pagar por lo malhecho. ¡He aquí buenas nuevas! Dios por su gran amor envió a su Hijo Jesucristo a sustituirte y morir en tu lugar. Cristo era perfecto y sin pecado. Cuando murió crucificado, sufrió por ti. Violaste la ley de Dios, incurriendo en muerte, pero Jesucristo pagó tu deuda con su sangre preciosa. Esto significa que Él puede perdonarte sin pasar por alto el pecado y la condena, porque en la cruz Él pagó pena de muerte por ti. Resucitó al tercer día y vive ahora a la diestra de Dios Padre. “Puede salvar perpetuamente a los que por Él se acercan a Dios” (Hebreos 7:25). ¿Quieres ser una de estas personas salvas para siempre? Acércate a Dios sólo por medio de Jesucristo.
Cristo hizo ese gran sacrificio en el Calvario por ti, en amor, como dádiva. No puedes perdonarte a ti mismo, ni puede una religión perdonarte. Sólo Dios puede perdonar judicialmente el pecado. Para recibir el don de Dios que es vida eterna, debes arrepentirte del pecado y confiar únicamente en el Señor Jesucristo. Sólo Él puede perdonarte y salvarte. No confíes en nada ni nadie más, ni santos, ni sacramentos, sino sólo en Aquel que murió por ti y vive para perdonarte y darte vida nueva. Puedes hacerlo ahora mismo. Es tu decisión. No te preocupes por qué dirá la gente, sino por qué dirá Dios. Confiesa ante Él tu pecado y declara tu confianza en el Señor Jesucristo, Cordero de Dios, como Sustituto tuyo que pagó tu condena en la cruz. “Cree en el Señor Jesucristo y serás salvo” (Hechos 16:31).

- - - - - - - - - - - -  - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
EL SOLDADO DE CHOCOLATE
Heroísmo, el acorde perdido del cristianismo 

por C.T. Studd

¡El heroísmo es el acorde perdido, la nota que falta en el cristianismo actual!
¡Todo verdadero cristiano es un héroe! ¡Un soldado sin heroísmo es un soldado de chocolate! ¿Quién no es incitado al desdén y a la burla con la simple idea de un soldado de chocolate? En tiempo de paz, los verdaderos soldados están como leones cautivos, inquietos dentro de sus jaulas, en cambio, la guerra los libera y los envía como a estudiantes contentos al final del día escolar, a obtener el deseo de su corazón o a perecer en el intento ¡El aliento vital del soldado es la batalla! La paz lo vuelve asmático y jorobado, mientras que la guerra le devuelve la vitalidad contagiosa. ¡Le da el corazón, la fuerza y el vigor de un héroe!

Todo verdadero cristiano, es un soldado de Cristo

¡Un héroe por excelencia! Valiente entre los valientes, que se burla de las seducciones de la paz y sus repetidas advertencias contra las dificultades, enfermedades, peligro y muerte, cosas que el valiente considera sus mejores amigos.
¡El cristiano que no es así, es un cristiano de chocolate! Que se disuelve en el agua y se derrite al olor del fuego. ¡Son golosinas, bombones, caramelos! Que pasan sus vidas sobre una charola de porcelana o en una cajita de dulces, cada uno envuelto suavemente, en un papelito con bordes recortados para preservar su preciosa y delicada textura.
He aquí, algunos ejemplos de soldados de chocolate, dados directamente por el mismo Señor Jesucristo.
Dice: “Yo voy, Señor” y no fue”, dijo que iría a los paganos, pero en lugar de hacerlo, se quedó con los cristianos. “Ellos dicen y no hacen”, mandan ir a otros, pero ellos no van. 
En la batalla de Sebastopol, un cabo mandó a un soldado raso para que arreglara una defensa militar. “Nunca mande a otro, a hacer lo que usted mismo tiene miedo de hacer”, le dijo el general Gordon al cabo, mientras él mismo saltaba sobre el parapeto de la trinchera para componerla.
Para el Cristiano de Chocolate, el sólo hecho de pensar en la guerra le produce un violento ataque de nervios, y el llamado a la batalla lo deja paralizado. Dice: “Realmente soy paralítico”, “Quisiera hacerlo, pero sólo puedo cantar”. He aquí algunos de mis versos favoritos:

Que me lleven al cielo
sobre camas de flores,
que otros conquisten el premio,
a través de mares de horrores.

¡Seguid vuestra marcha! héroes cristianos,
que nosotros también avanzamos
aunque no a la misma batalla.

¡Deteneos! Cuidad a los niños
mimadlos con muchos cariños
alimentadlos, vestid en pañuelo,
a los bebes que están en el suelo.

Hacedlo sin tregua, no deben parar
hasta que de gorditos
no puedan ni andar

Coro:
Dejadnos deambular en paz dejadnos dar
vueltas y vueltas en la guardería,
niñeras somos, en vez de infantería.

Dulces, pasteles y demás
en nuestros platos deben estar
porque lo mas deleitoso,
no nos debe faltar.

"Gracias al buen Señor", decía una frágil y anciana señora: ¡“Dios nunca quiso que yo fuera una gelatina” y en verdad no lo era! 
Dios jamás ha sido y nunca será un fabricante de chocolate

Los hombres de Dios siempre son héroes. En las Escrituras se pueden hallar sus gigantes huellas sobre las arenas del tiempo. 

NOE
Caminaba con Dios y no sólo predicaba la justicia, sino que la practicaba. Pasó por el agua y no se disolvió, se enfrentó a la opinión general de su época, desdeñando tanto el odio como la mofa de quienes se burlaban de la idea de que existiera un sólo camino para ser salvos. Noé les advirtió a los incrédulos del juicio de Dios, y una vez que entró en el arca, no abrió la puerta ni una pulgada, ya que Dios la había cerrado. He ahí un verdadero héroe inconmovible ante el temor al hombre.

Aprende a desdeñar de los hombres sus elogios, 
aprende a perder con Dios;
Jesús conquistó el mundo sufriendo vergüenza,
y a todos nos invita a seguir su senda.

ABRAHAM
Fue un sencillo campesino que al escuchar las palabras del Dios invisible, se marchó con su familia y su ganado, a través del terrible desierto hacia una tierra lejana, para vivir en medio de un pueblo cuyo idioma no hablaba ni entendía. ¡Qué tal! Y más tarde hizo algo mejor. Marchó de prisa contra un ejército de cinco reyes aliados, enaltecidos por su reciente victoria, ¡todo para rescatar a un sólo hombre! ¿Su ejército? Sólo unos 318 hombres equipados para la aventura, ¡Y ganó! “El que se une con Dios siempre gana”. ¡Qué intrepidez! ¡Era sólo un campesino sin preparación alguna para la guerra! No obstante: ¿Qué héroe ha superado esa hazaña? ¿Y cuál fue su secreto? Abraham era amigo de Dios.

MOISÉS
Llamado el hombre de Dios, fue una especie de camaleón humano. Erudito, general, legislador, líder, etc. Criado como nieto del rey, tenía muchas posibilidades de llegar al trono, para lo cual sólo había un obstáculo: “La verdad”. ¡Qué decisión más difícil! ¡Qué tentación! ¡Un trono a cambio de una mentira! La ignominia, el exilio, o bien la muerte, a cambio de la verdad. ¡Hizo el papel de hombre!
“Rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo, que los tesoros de los egipcios...” (He. 11:24-26)
Lo veo de nuevo... Ahora viejo y solitario, marchando imperturbable de regreso a Egipto, después de cuarenta años de exilio, a enfrentarse al león en su guarida, a liberar a los esclavos del Faraón frente a sus propios ojos, y conducirlos a través del inmenso y peligroso desierto.
¡Un proyecto que requiere esfuerzo, y sobrepasa a cualquier otro! ¡Los designios de Dios siempre han sido así! Mira el Jordán, a Jericó, a Gedeón, Goliat, y a muchos más. Los Proyectos fáciles llevan otra marca: ¡La de la Brigada de Chocolate! ¡Cuánto aman sus escondrijos y aún así se consideran sabios! Los verdaderos cristianos se deleitan en aventuras de gran riesgo por Cristo, esperando grandes cosas de Dios e intentando las mismas grandes cosas con regocijo. En la historia no se han podido igualar las hazañas de Moisés. ¿Cómo lo hizo? No consultó con carne y sangre. No obedeció a ningún hombre, sino a Dios.
Y de nuevo veo al anciano de barba gris, bajando esta vez del monte a grandes zancadas, precipitándose al campamento, con los ojos flameantes como carbones encendidos. Un sólo hombre contra dos millones de danzantes, desenfrenados en el libertinaje. ¡Bravo! ¡Bien hecho viejo! ¡De primera! Su rostro no palidece, pero su boca se mueve y creo escuchar las palabras: “Si Dios está por mí, ¿quién contra mí? No temeré a diez millares de hombres que se hayan puesto en contra mía. Aún si un ejército acampe alrededor de mí, no temerá mi corazón”. Y no temió ¡Nuevamente ganó Moisés! ¿De dónde tal valor y heroísmo? Escucha lo que Dios dice de él: "Y aquel varón Moisés era muy manso, más que todos los hombres que había sobre la tierra" (Nm. 12:3)
El Señor habló cara a cara con Moisés, como hablamos nosotros con un amigo: “No así a mi siervo Moisés, que es fiel en toda mi casa. Cara a cara hablaré con él....” (Nm. 12:7-8) Tal es la afirmación acerca de Moisés, el camaleón, el hombre y amigo de Dios; por consecuencia, un héroe de primera clase.
documento hallado en www.scribd.com

continuará, d.v. en el siguiente número



jueves, 3 de noviembre de 2011

EN ESTO PENSAD -- NOVIEMBRE 2011

El Amor Al Dinero


El amor al dinero es la raíz de todos los males. Por ejemplo, es la raíz de las mentiras. J. H. Jowett cuenta que le pidió ayuda a un hombre acaudalado en Nueva York a favor de una cause extremadamente digna.

"Su expresión cambió inmediatamente ante mi apleción, y habló como quien está al borde de la miseria: 'En realidad no puedo darte dinero. Con todo lo que está sucediendo no sé en qué vamos a terminar'. Pocas semanas después murió y en su testamento había más de 60 millones de dólares. Me pregunto si al final de su útlimo día escuchó al mensajero del Señor diciéndole: 'Necio, esta noche viene a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?"

El amor al dinero conduce al fraude, al robo e incluso al homicidio. Arruina matrimonios y a los hijos. Causa trastornos nerviosas y emocionales, y ha llegado a desembocar en el suicidio. Las personas acaudaladas viven en el temor del robo, el secuestro y la extorsión. Les preocupa la inflación y el colapso mercantil. Sufren de estrés, aburrimiento, insatisfacción y envidia. A veces caen en la prisión y en la desgracia. Debido a que las Escrituras condenan todo ese estilo de vida, se apartan de la fe en lugar de lograr un verdadero cambio. Tergiversan, cambian y reescriben la Biblia para justificar su opulencia. No sólo eso, sino que son traspasados con muchos dolores. Cuando Howard Hughes murió, dejó un estimativo de unos 2.300 millones de dólares. Sin embargo, una revista informó:

"A pesar de todo su poder, llevó una vida sombría, sin alegría y medio lunática ... Un recluso emparedado por sus propios temores y debilidades paralizantes. En otro tiempo un personaje dinámico y vibrante, descuidó su aspecto y su salud durante los últimos quince años de su vida, hasta convertirse en un espectro patético ... Hughes era drogadicto ... Su apariencia física era terrible ... Si bien cuatro médicos rotaban para cuidarle, su condición era espantosa ... Su principal diversión era ver películas ... Aunque vivía semana tras semana a base de una dieta que un empleado de una tienda de "todo a 10 centavos" hubiese desdeñado, era tan melindroso en cuanto a su preparación como un cliente del Maxim's ... Tomaba una o dos cucharadas [de sopa], [y] se volvía a enfrascar en la película ... En ocasiones llegaba a calentarle la misma lata de sopa diez o doce veces." 
http://www.time.com/time/magazine/article/0,9171,918526-1,00.html
http://www.time.com/time/magazine/article/0,9171,918527-1,00.html

...¿Qué concluimos? Ronald Sider nos lo dice en su libro: Rich Christians in an Age of Hunger ("Cristianos Ricos en una Época de Hambre"):

"El rico necio es el epítome de la persona codiciosa. Él tiene la compulsión avara de adquirir más y más posesiones a pesar de no necesitarlas. Y ese éxito fenomenal de amontonar más y más posesiones conduce a la conclusión blasfema que las posesiones pueden satisfacer sus necesidades. Pero desde la perspectiva divina, esta actitud es una tremenda locura. Él no es más que un necio".
William MacDonald, de su libro El Manual del Discípulo,  págs. 79-80, traducción corregida.

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 

Tuyo Es el Reino, y el Poder, y la Gloria

En Mateo 6:9-11 el Señor enseñó a Sus discípulos cómo orar correctamente, no como los hipócritas que oran para ser vistos por los hombres, ni como los paganos con su vana palabrería. El Padrenuestro es bueno. Es un patrón para la oración de los discípulos, los creyentes, porque comienza con "Padre". Si uno no ha nacido de nuevo Dios no es su Padre y no tiene derecho al Padrenuestro. Esta corta pero elegante oración comienza con Dios, Su nombre, reino y voluntad. Pasa de ahí a presentar nuestras peticiones, y termina diciendo: "porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén".
Notemos en particular esta palabra "porque". Es una conjunción que indica una explicación o razón. Viene al final y explica por qué podemos y debemos hacer tales peticiones. ¡El máximo gobernador del universo, el todopoderoso y eternamente glorioso es nuestro Padre! Tenemos el privilego del acceso familiar. Nuestro Padre tiene reino, poder y gloria. ¿Quién como Él? Los reyes, presidentes y dictadores de este mundo no son como Él ni duran como Él. ¿Para qué vamos a confiar en un gobierno u otros hombres, por ricos y poderosos que sean a plazo corto? ¡No son como nuestro Padre! Los creyentes tenemos un gran privilegio, el de orar al Dios eterno, nuestro Padre. Suyo es todo, para siempre. ¡Animo, y acerquémonos a Él en oración!
Carlos

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
UNA CABAÑA EN MELONAR

"Y queda la hija de Sion como enramada en viña, y como cabaña en melonar, como ciudad asolada" (Is. 1:8).

Puede parecernos bonita la idea de "enramada en viña", pero aquí es diferente. El dueño hacía la enramada para el tiempo de la vendimia, algo temporal, en el melonar u otro campo. Pero al terminar la cosecha, estas son abandonadas. Terminan derrumbándose y presentan una escena triste. Si no estamos alertas nuestro testimonio puede colapsar bajo los rigores de la vida cotidiana, el trabajo y las diversiones. Tengamos cuidado, hermanos, de no descuidar la vida espiritual porque es frágil como una enramada. Mantengámonos cerca del Señor, en comunión con Él, leyendo y meditando en Su Palabra, orando siempre y buscando la comunión de los santos.
Roy Hill, del calendario devocional "Choice Gleanings"

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Píldoras antipentecostales
H. W. Graham; adaptado de La Sana Doctrina, número 51, 1967

"Habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina" (la 
doctrina sanadora), Tito 2.1

Píldoras para combatir la confusión sobre el Día de Pentecostés
· El Espíritu Santo fue enviado por el ruego del Señor y no por la oración de los creyentes; Juan 14.16 
· La Escritura no dice que los discípulos pasaron diez días en el aposento alto orando por el Espíritu; Hechos 2.1, Lucas 24.51 al 53 
· Cuando vino el Espíritu no hubo viento ni fuego. La experiencia fue “como” viento y fuego; Hechos 2.1 al 4. Quedan por verse varios detalles mencionados en Joel capítulo 2, cuando en el futuro esa profecía reciba su cumplimiento pleno.
· El bautismo de fuego es de juicio, y no de bendición; Mateo 3.10 al 12 
· Las señales que acompañaron la venida del Espíritu Santo no se repiten continuamente, como tampoco se repiten las que acompañaron la venida del Señor Jesús; Lucas 2.9 al 14 
· Las señales de Pentecostés fueron repetidas en la casa de Cornelio para convencer a los hermanos judíos que los creyentes gentiles efectivamente habían recibido al Espíritu igual que ellos; Hechos 10.45, 11.12 al 18 
· Estas señales se repitieron también en Efeso para convencer a los discípulos de Juan el Bautista que Cristo y el Espíritu Santo ya habían venido tal como Pedro les anunció; Hechos 19.1 al 7 

Píldoras para combatir ideas erróneas sobre el antiguo don de lenguas
· Solamente los apóstoles estuvieron juntos en Pentecostés y hablaron lenguas; Hechos 1.26, 2.1,7,14 
· Pedro no predicó en lenguas. Los tres mil recibieron al Espíritu sin hablar en lenguas. Las lenguas oídas en Pentecostés eran idiomas vivos y propios de los oyentes; Hechos 2.6,7,11,14,38 
· En ninguna parte de las Escrituras consta que una mujer haya hablado en lenguas. 
· La iglesia menos espiritual, la que había en Corinto, es la única que recibió una epístola que hablara de lenguas. La exhortación es de buscar los mejores dones, y no dice que el de las lenguas es uno de ellos; 1 Corintios 12.31;14.39 
· Cuando existía el don de lenguas se permitía que hablasen solamente dos o tres hermanos en cada reunión, uno a la vez, ninguna mujer, y sólo con intérprete; 1 Corintios 14.27, 28, 34 
continuará, d.v., en el siguiente número


- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Las Etiquetas

La rosa, si es llamada otra cosa,
Todavía huele bien, es verdad.
Pero si de “rosa” etiquetamos,
A petunias y geranios,
Siguen siendo lo que son,
La etiqueta nada cambia.

     Nos gustan las etiquetas, porque nos ahorran el trabajo de pensar. Muchos se llaman socialistas o demócratas o republicanos sin saber qué significa la etiqueta. Uno puede llevar la etiqueta de “éxito” si ha ganado mucho dinero, aunque su vida personal sea un fracaso colosal. 
Una etiqueta popular pero poco precisa es la de “cristiano”. Mucha gente, si se le pregunta: “¿es usted cristiano?” diría que sí. Esto es porque la etiqueta incluye a tales como:
1. Cristianos Hereditarios. Personas cuyos padres eran cristianos y por lo tanto ellas piensan que también lo son. Puede que asistan ocasionalmente a una iglesia, o quizá van con regularidad, especialmente a la iglesia de sus padres.
2. Cristianos Éticos. Personas que son buenas. Viven vidas decentes y quieren que los demás también vivan así. Son ciudadanos respetuosos, buenos vecinos, buena gente. Les gusta la Regla de Oro que enseñó Jesús. Piensan que si uno hace lo mejor que puede, eso es todo lo que se le puede pedir.
3. Cristianos Culturales. Personas que viven en una comunidad o nación que se llama “cristiana”, donde predomina una religión “cristiana”. Les gustan la música y las ceremonias, especialmente para bautizos, bodas y entierros.
4. Cristianos Sociales. Personas que les gusta encontrar a sus amigos en los cultos de la iglesia. Les gusta que sus hijos hagan buenas y sanas amistades allí, y disfrutan las actividades sociales. Los hombres de negocio encuentran que asociarse con una iglesia va bien para el negocio.
5. Cristianos Verdaderos. Personas que creen que Jesucristo es el Hijo de Dios que murió en la cruz para obtener el perdón de sus pecados. Creen como dijo uno: “yo soy el pecador por quien Cristo murió en la cruz”. Los cristianos verdaderos han reconocido que son pecadores, se han arrepentido y le han aceptado como su Señor y Salvador.
Puede que este último grupo también tenga padres cristianos, intenten vivir vidas decentes, asistan a los cultos de una iglesia y disfruten actividades culturales y sociales cristianas. Pero reconocen que ninguna de estas cosas les constituye “cristianos”. Un cristiano, un creyente de verdad, ha experimentado un cambio tan radical y completo que es llamado “nacer de nuevo”. ¿Es así contigo, amigo lector?
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
¿ES BÍBLICO EL SISTEMA UNIPASTORAL?
(Parte III)

Algunas Objeciones Contestadas (continuación)

Objeción 5: Y ¿qué me dice del papel de liderazgo de Jacobo en Jerusalén (Hch.12:17), Epafras en Colosas (Col. 4:12), y Epafrodito en Filipos (Fil. 2:25)?

Respuesta: Esta objeción, la cual he oído en defensa del sistema unipastoral, es un ejemplo patente de estar leyendo la Palabra de Dios a través de las lentes distorsionadas de la tradición. Jacobo, el hermano del Señor, era un varón piadoso junto con los apóstoles (Gá.1:19), no el pastor de la iglesia. Epafras era un evangelista, el “consiervo amado” de Pablo, quien llevó el evangelio a los colosenses (Col. 1:7). ¡Es extraño que él fuera “pastor” de la iglesia de Colosas, ya que nunca se le ve presente allí, sino siempre con Pablo, como en Colosenses 4:12 y  Filemón 23!  Epafrodito es descrito simplemente como uno de los colaboradores de Pablo, que fue enviado por la iglesia de Filipos para ministrar a sus necesidades. ¿Es todo esto evidencia para el sistema unipastoral?

Objeción 6: ¿No se refieren los “ángeles” de las iglesias en Apocalipsis 2-3 a los pastores (“Escribe al ángel de la iglesia en Éfeso...” etc.), y sólo hay uno por iglesia?

Respuesta: Nadie que leyera el Nuevo Testamento, a menos que lo hiciera con  nociones preconcebidas, se imaginaría jamás que los “ángeles” de Apocalipsis 2-3 hacen referencia a pastores. Aunque la palabra griega angelos puede traducirse como “mensajero”, todas las demás veces que aparece esta palabra en Apocalipsis, ¡y ocurre 76 veces! – incuestionablemente hacen referencia a ángeles literales. Si significa “mensajero” en Apocalipsis 2-3, aun podría llegar a abarcar con dificultad el significado de “pastor”. En todos los casos que el Nuevo Testamento usa la frase “mensajero de...” (“mensajero de Satanás,” “mensajeros de Juan”, etc.), siempre describe por quién ha sido enviado el mensajero, y nunca a quién. En otras palabras, “el mensajero de la iglesia en Éfeso” probablemente no significaría un mensajero enviado a la iglesia, sino un mensajero enviado por la iglesia, quizá como parte de una delegación para ministrar al apóstol en su exilio en Patmos y para recibir sus instrucciones.

Objeción 7: Quizá las muchas referencias que el Nuevo Testamento hace a ancianos múltiples se deben a que, mientras que cada iglesia tenía un solo anciano o sobreveedor, cada ciudad tenía varias iglesias diferentes. Por ejemplo, cuando Pablo escribe a: “los santos en Cristo Jesús que están en Filipos, con los obispos y diáconos” (Fil.1:1), puede que hubiera unas cuantas congregaciones en Filipos, cada una con su propio sobreveedor.

Respuesta: Este razonamiento puede parecer ser la respuesta a ciertos pasajes, pero desde luego falla en vista de otros, como Hechos 14:23 (“Constituyeron ancianos en cada iglesia...”), Santiago 5:14 (“Llame a los ancianos de la iglesia”), etc.

Objeción 8: Incluso si se pudiera demostrar que las iglesias del Nuevo Testamento tenían varios ancianos, no tendría por qué ser normativo en la iglesia actual. A fin de cuentas, todos estamos de acuerdo en que los creyentes en la iglesia de Jerusalén vendieron sus bienes y tenían todas las cosas en común, pero nadie sugere que sigamos ese modelo hoy.

Respuesta: Decir que el modelo de la iglesia del Nuevo Testamento no es normativo para las iglesias actuales es equivalente a decir que Dios nos ha dejado completamente sin modelo. ¡Doloroso pensamiento! ¿Nos ha dejado realmente Dios a la merced de la inventiva humana en decidir cómo debe conducirse el ministerio de Su iglesia? Al contrario, digamos con el salmista: “estimé rectos todos tus mandamientos sobre todas las cosas” (Sal. 119:128). En cuanto al sistema comunal de la iglesia de Jerusalén, está claro que no era el modelo de todas las demás iglesias del Nuevo Testamento. Las acciones de los primeros creyentes de Jerusalén fueron mandadas por circunstancias específicas que no se repitieron, que sepamos nosotros, en ninguna otra asamblea del Nuevo Testamento, (se supone que incluso en Jerusalén el sistema no tardó mucho en interrumpirse). Este ejemplo no puede utilizarse para justificar el haber fallado en conformarse al modelo del Nuevo Testamento cuando está tan claramente revelado.
Objeción 9: No puede negar que a través de los años Dios ha bendecido poderosamente a muchos pastores e iglesias que han usado el sistema unipastoral, y aún continúa haciéndolo hoy.

Respuesta: A nadie se le ocurriría negar tal cosa. Aun así, los problemas mencionados antes tampoco pueden ser negados razonablemente. Y ¿quién diría que el fruto y utilidad de la iglesia en conjunto están cerca del nivel divinamente deseado? Además, es un error pensar que porque Dios en su gracia esté bendiciendo a alguien que opera bajo ciertas creencias o prácticas, Él las aprueba. Dios ha usado grandemente, por ejemplo, a algunos predicadores, maestros, y misioneros que mantenían la doctrina que los creyentes pueden perder la salvación. Pero ¿quién de nosotros sugeriría  que esta idea tiene la aprobación de Dios, o que no es importante sostener la doctrina bíblica de la salvación? Gracias a Dios, Él no requiere que seamos perfectos en nuestra interpretación de la Escritura antes de usarnos. De ser así, ¿quién podría esperar ser usado? Pero conforme vamos recibiendo más luz, es nuestro deber y gozo cambiar para conformar nuestras creencias y prácticas a la Palabra de Dios.

Objeción 10: Un sistema de varios ancianos puede resolver algunos problemas, pero a la vez crea otros.

Respuesta: Lo reconozco de buena voluntad. De todas maneras, cuando se actúa conforme al modelo bíblico los problemas que surgen son bíblicos. Es decir, son problemas ya anticipados por la Escritura, y en ella encontramos orientación para afrontarlos. Además, no olvidemos que muy al margen de la cuestión de los problemas que pudieran resolverse o crearse, debemos seguir el modelo del  Nuevo Testamento simplemente porque es el modelo del Nuevo Testamento. Nos conformamos a la autoridad de la Escritura como cuestión de principios, no por razones pragmáticas. Pero cuando lo hacemos, encontramos invariablemente que el camino de Dios es el mejor.

Objeción 11: No piensará que todos los problemas mencionados desaparecerían con tal de que nuestras iglesias cambiesen su modelo de liderazgo.

Respuesta: Desafortunadamente, no. Al menos, no de la noche a la mañana, particularmente donde la mentalidad del clero/laico ha estado firmemente arraigada durante décadas. Pero incluso en esos casos, un regreso al modelo nuevotestamentario, adoptado sin reservas por la iglesia local, tendría un efecto espectacular. Por lo menos se podrían empezar a resolver las actitudes no bíblicas y los numerosos problemas cultivados por la falsa distincción entre el clero y el laico. En otras situaciones, donde fuese posible un nuevo comienzo (como en el campo misionero, en iglesias nuevas, o con nuevos convertidos), estos problemas pueden evitarse completamente. 

¿Qué diremos entonces? El pastoreo de un solo hombre, lejos de tener la sanción de la Escritura, es esencialmente una repetición “protestantizada” del sistema sacerdotal Católico Romano. Para los que proclamamos la Biblia – no la tradición – como nuestra autoridad, es hora de escudriñar fervientemente las Escrituras para ver si estas cosas son así (Hch. 17:11).
Quisiera que cada lector de este librito compartiese la bendición que yo encontré cuando “volví mis pies a tus testimonios” (Sal.119:59), y escogí reunirme en comunión con los que se congregan en la sencillez y el orden del Nuevo Testamento.
      Mark Frees

Observación del editor:
Algunas iglesias, aunque en teoría tienen un consejo de ancianos, en la práctica funcionan como si tuviesen un pastor. Uno de los ancianos ejerce su influencia y toma las decisiones casi sin consultar a los demás. Todos deben consultarle a él, pero él no consulta casi a nadie. En vez de trabajar como equipo, ese anciano actúa como el pastor y el otro o los otros como sus pastores asistentes. Quizás porque él empezó la obra, o porque es el más viejo, o  es quien compró o edificó el local, o porque es el más rico y quien más contribuye, o porque pertenece a cierta familia. Pero ninguna de esas excusas le hará salir aprobado delante de Dios porque no debe haber un sólo hombre gobernando en una iglesia, ni en título ni en la práctica. El Señor dice: "ancianos en cada iglesia", y nadie tiene derecho a modificarlo. 

sábado, 15 de octubre de 2011

EN ESTO PENSAD -- OCTUBRE 2011


APACENTAD LA GREY DE DIOS
(Parte III)


EL ESPÍRITU EN QUE DEBE HACERSE LA OBRA (1 P. 5:2)
“Cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente”


Podemos entender la reticencia de un hombre respecto al servicio como anciano, por un número de razones. Primeramente, los requisitos para el carácter del obispo son exigientes. El apóstol Pablo apunta 16 cualidades “necesarias” en un perfil que reta a cualquier hombre que aspira al liderazgo cristiano (1 Ti. 3:1-7). En segundo lugar, el tiempo requerido para hacer la obra correctamente le dejará menos tiempo para su familia o para relajarse. Y en tercer lugar, guiar al pueblo de Dios puede ser emocionalmente costoso: la preocupación, los desvelos, el cansancio y el desánimo, y a veces la crítica y murmuración son la porción del anciano.
A los que son reticentes debido al sacrificio que requiere, Pedro diría: “Acordaos de que el Señor sacrificó Su vida por Sus ovejas, y ahora Él os llama a pastorearlas, cuidarlas y poner sus intereses antes que los vuestros, como Él hizo. Así que ¡hacedlo! y ¡hacedlo voluntariamente!”

LA MOTIVACIÓN DETRÁS DEL COMPROMISO (1 P. 5:2)
“no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto”

La Biblia dice dos cosas acerca del dinero para personas que están en el servicio de Dios:
1) El que sirve al Señor debe ser remunerado económicamente por el trabajo que hace, de modo que sus necesidades materiales sean suplidas (1 Co. 9:7-11, 14; 1 Ti. 5:17-18).
2) El siervo de Dios debe vivir su vida enfocado en la importancia y el valor de su obra para el Maestro, sin ánimo de lucro ni provecho material (1 Ti. 3:3), y sin siquiera sombra de impropiedad en asuntos económicos.

LA MANERA EN QUE UN ANCIANO DEBE COMPORTARSE (1 P. 5:3)
“no como teniendo señorío...sino siendo ejemplos de la grey”

Un anciano es un líder en la iglesia, pero no es un señor. El que es señor tiene gente debajo suyo, pero el que es anciano considera a los creyentes como entregados a su cuidado.
Un señor protege su gloria, pero un anciano piadoso busca glorificar a Cristo.
Un señor le dice a la gente lo que tiene que hacer, pero un anciano debe enseñar al pueblo qué hacer, porque en todo aspecto de su vida se le requiere ser “ejemplo de la grey.”
Un anciano debe poder decir a los suyos: 
“Miradme y veréis cómo debéis vivir, porque Cristo está en el centro de todo lo que hago".
"Venid a mi casa y veréis cómo un hombre debe comportarse con su esposa e hijos".
"Venid conmigo al trabajo y veréis que Jesucristo es el Señor de mi trabajo y negocios".
"Considerad mi comportamiento en la iglesia. Soy un líder pero es obvio a todos que no codicio el poder ni la autoridad, sino que soy vuestro siervo".
"No busco posición. Mi preocupación es ayudaros a descubrir y ocupar la posición que el Señor tiene para vosotros en la vida de nuestra asamblea".
"No deseo alabanza. Más bien prefiero animaros a ser lo mejor que podáis para Dios, y que sepáis que sois importantes y de valor en la comunión de la iglesia”.

LA RECOMPENSA DE UN TRABAJO BIEN HECHO (1 P. 5:4)
“Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria”.

El Príncipe de los pastores viene, y Su recompensa para todos Sus fieles pastores es una corona de gloria. Esta corona no disminuirá ni se envejecerá; será eternamente la misma – no como las iglesias en que han servido los ancianos. Las iglesias cambian continuamente. Los miembros jóvenes se hacen mayores y se trasladan a otros lugares. El Señor llama a los creyentes viejos a Su hogar, al rebaño celestial. Algunos hermanos salen de la asamblea y van a otra donde esperan ser más felices. Otros salen y simplemente vagan. Este movimiento continuo de las personas puede causar tristeza a los ancianos. ¡Pero no hay tristeza en la corona! Ella no se marcha, ni envejece, ni cambia. Será eternamente igual.
“Lo que destaca de la ceremonia de recompensa”, podría decir Pedro, “es que recibirás la corona directamente de la mano del Señor. Pero, mis hermanos, cuando Él os la dé, pienso que vuestros ojos no mirarán la corona, sino las manos con las cicatrices del Calvario todavía visibles, y os postraréis delante Suyo en adoración, no porque Él es el Príncipe de los Pastores, sino porque Él es el Buen Pastor que dio Su vida”.
“Y continuando allí arrodillados delante de Él, la corona estará en la sombra de la cruz, y os alegraréis por cualquier pequeño sacrificio que hubiereis hecho en Su servicio. Y cuando Él diga: “Bien hecho”, vuestro gozo será completo, porque entonces sabréis que vuestra vida de fiel servicio ha dado placer a Aquel que todo lo dio por vosotros”.                     
concluido
John McQuoid era misionero en Etiopía, y ahora es editor de la revista misionera: "Echoes of Service" en el Reino Unido.  Él y su esposa Edith viven en Larne, Irlanda del Norte.

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

Las Promesas y el Carácter de Dios
A. W. Tozer

Cuando leo en mi Biblia, veo esta promesa: "Si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad [Dios], Él nos oye. Y si sabemos que Él nos oye en cualquiera cosa que pidamos,sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho". ¡Esa es una promesa que Dios nos hace! Leo también las palabras de Jesús: "Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo" (Jn. 14:13). ¡Esa es una promesa de parte de Dios! Pero, ¿cuán buenas son las promesas? Tan buenas como sea el carácter del que las hace. ¿Cuán bueno es? ¡Ah! Ahí está nuestra confianza. La fe dice: "¡Dios es Dios!" Él es el Dios santo que no puede mentir, el Dios que es infinitamente rico y que puede cumplir todas sus promesas. Él es el Dios que es infinitamente íntegro y honrado que nunca ha engañado a nadie. Es el Dios que es infinitamente verdadero; las promesas son tan buenas y verdaderas como el Dios que las hizo.
¿En qué, pues, nos equivocamos nosotros? ¿Que sucede con la confianza? Nos comportamos con Él de forma inacptable, tratamos de usarlo como una escapatoria del infierno. Lo usamos para que nos ayude cuando nuestro niño está enfermo, y después seguimos viviendo a nuestra manera. Luego tratamos de aumentar nuestra fe leyendo más promesas en la Biblia. ¿Pero eso funciona? Le puedo decir con seguridad que eso no va a funcionar. Tenemos que estar interesados en la persona y en el carácter de Dios, no en las promesas. Por medio de las promesas conocemos lo que Dios ha preparado para nosotros, nos enteramos de lo que podemos reclamar como nuestra herencia, aprendemos cómo debemos orar. Pero la fe misma debe descansar en el carácter de Dios.
¿Es difícil ver esto? ¿Por qué no hacemos hincapié en ello en nuestros círculos evangélicos? ¿Por qué tenemos temor de declarar a las personas en nuestras iglesias que deben conocer a Dios? ¿Por qué no les decimos que deben ir más allá de hacer de Dios un bote salvavidas para su rescate o una escalera para escapar de un edificio en llamas? ¿Cómo podemos ayudar a nuestro pueblo a superar la idea de que Dios existe para ayudarle a manejar su negocio o pilotar su aeroplano?
Dios no es un mozo de estación de ferrocarril para cargar con sus maletas y servirle a usted. Dios es Dios. Es el creador de los cielos y de la tierra. Él sostiene el mundo con sus manos y pesa el polvo de la tierra en balanza. Extiende el firmamento como un manto. Él es el Dios grande y todopoderoso. Él no es su siervo. Es su Padre y usted es su hijo. Él se sienta en el cielo y usted está en la tierra.
A. W. Tozer, de su libro Fe Más Allá De La Razón, Portavoz, págs.  37-38
.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

“¡NO!” al Ocultismo

“No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas...” (Dt. 18:10-12)

Sólo Dios sabe el futuro. Además, el Señor nos prohíbe consultar acerca del futuro a cualquier otra cosa o persona excepto la Biblia. Los que amamos al Señor podemos confiar en Él en cuanto al futuro. Él nunca nos desamparará. Sus misericordias son nuevas cada mañana (Lam. 3:23). Esto significa que Él siempre te amará y buscará tu bien. Nunca se equivocará, nunca te hará mal, nunca te abandonará. Lee el Salmo 23, Juan 14:1-3 y Apocalipsis 21:1-22:5 y verás el futuro que te espera como creyente.
Los del mundo muchas veces curiosean en cosas como cantaba Lola Flores: “Salud, dinero y amor”. Pero si eres creyente y discípulo del Señor Jesucristo, no te corresponde el leer los horóscopos (ni aun por curiosidad), consultar las cartas de Tarot, jugar con “oija”, escuchar los programas de radio acerca de cosas como “la cuarta dimensión”, ir a curanderos, consultar a los adivinos, involucrarte en el yoga o la meditación transcendental, ni usar las estampas, los amuletos o talismanes (aunque sean los adornos de moda). Si te preguntan de qué signo eres, diles que ninguno porque eres creyente en el Señor Jesucristo. Efesios 5:11-12 exhorta: “Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas; porque vergonzoso es aun hablar de lo que ellos hacen en secreto”. No debes leer, mirar ni escuchar a todo esto que se ofrece hoy para saber el futuro, aconsejar o guiar la vida. Es el camino del mundo, de las tinieblas, y va contra las claras instrucciones y prohibiciones divinas (Lv. 20:6,8; Dt. 4:17-19, 23-24; Dt. 13:1-4; 18:20-21; Is. 8:19. 20, 22; Ez. 13:6-9; 18-23). El Señor quiere y merece ser el único objeto de tu confianza. Nadie te ama como Él, ni puede guiarte y cuidarte como Él.
No hay una forma inofensiva de celebrar "Halloween" el 31 de octubre, porque es una fiesta pagana, de ocultismo, de brujería y satanismo. Si quieres agradar al Señor y serle fiel, apártate de todo esto porque es abominación.
Hermano, hermana, lo tuyo es la Biblia, porque en ella Dios te habla. Tú le hablas en oración, y Él te habla a través de Su Palabra. Léela, conócela toda, domínala y sabrás todo lo que te hace falta. Deja lo oculto para los que no tienen la luz. Gózate con lo que Dios te ha dado: ¡Su Palabra! “Lampara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino” (Sal. 119:105).

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

¿ES BÍBLICO EL SISTEMA UNIPASTORAL?
(Parte II)

Tristes Consecuencias (continuado del número anterior)

(3) Deja poco o nada de lugar para ejercitar los dones espirituales en las reuniones de la iglesia, aparte de los del pastor.

(4) Conduce a las iglesias a ser edificadas en la carne, con cosas como programas especiales y promociones, y la personalidad del pastor debe reemplazar los dones espirituales del cuerpo. 

(5) Produce un extendido desánimo en los pastores, porque están tratando formalmente de ocupar una posición y hacer un trabajo que no es bíblico.

(6) Niega a los pastores la comunión en el ministerio que tan desesperadamente necesitan. Normalmente la diferencia en la visión espiritual y la responsabilidad del ministerio entre el pastor y la congregación es tan grande que su única comunión significativa es con otros pastores, que no son colaboradores en el mismo campo, sino que tienen los suyos propios por los que preocuparse.

(7) Tiende a negar la presidencia del Espíritu Santo en la iglesia. Aunque puede que el pastor busque de verdad la mente del Espíritu, su percepción está nublada por su propia personalidad, deseos, etc. Cuánto mejor es, cuando hay que formular planes o tomar decisiones, para los ancianos como grupo, como los que representan el gobierno de Dios en la iglesia, ayunar y orar hasta que el Espíritu Santo obre en ellos para que tengan unanimidad, como en Hechos 13:1-3.

(8) Como toda la responsabilidad del ministerio de la iglesia se le ha dado a un solo hombre, y como es cierto que ningún hombre tiene todos los dones, los pastores (y los misioneros) se ven forzados a usar mucho de su tiempo llevando a cabo un ministerio en el que no han sido espiritualmente preparados por el Espíritu de Dios. La lástima es que si no lo hacen ellos, este ministerio se queda sin hacer.

(9) Crea una situación en la que una persona, el pastor, puede cambiar una iglesia sana doctrinalmente en una iglesia herética de la noche a la mañana. Teniendo varios ancianos, aunque no se asegura la inmunización absoluta en cuanto a los errores doctrinales, sí que se provee de un fuerte control contra la enseñanza herética.

(10) Conduce a una escasez paralizante de obreros cristianos nacionales en muchas áreas de misión, por la presunción de que estos obreros deben ser preparados profesionalmente e importados de fuera de la iglesia. ¿Dónde está la confianza en que Dios ya ha provisto al cuerpo con los dones de liderazgo necesarios?

(11) Pone excesiva presión en la esposa e hijos del pastor, ya que estos se encuentran forzados a vivir en un ambiente de “pecera” como la familia “del predicador”.

Éstas no son más que una muestra de las consecuencias de admitir creencias y prácticas no bíblicas respecto al ministerio.

Algunas Objeciones Contestadas

Objeción 1: El trabajo correcto del pastor no es asumir todo el ministerio de la iglesia, sino movilizar y equipar a los santos para hacer la obra del ministerio. Por lo tanto, la mayoría de los problemas que ha mencionado son resultados, no del sistema unipastoral por sí mismo, sino del abuso de este sistema.

Respuesta: Ya que el sistema unipastoral no está en la Escritura, y está universalmente rodeado por estos problemas, los que lo defienden deberían reconocer que el sistema en sí es un error, y no tiene ni apoyo ni garantía en la Escritura. El concepto de una iglesia guiada por un pastor (o misionero) que moviliza a los santos para la obra del ministerio suena muy atractivo, pero la experiencia de miles de pastores frustrados testifica que esto simplemente no funciona. Hay una percepción profundamente arraigada en las mentes de  la congregación de que la obra cristiana es para un grupo especial. El vacío del clero es el gran inmovilizador de los santos. Cualquiera que trata de abolir este vacío es condenado al fracaso mientras se agarra a un sistema en el que un hombre, preparado y acreditado profesionalmente, es visto como “el predicador” o “el siervo (único) de Dios”. A propósito, los que se adhieren al concepto del pastor normalmente tienen una noción muy limitada de lo que incluye la “obra del ministerio”. Por ejemplo, aun el pastor que está equipando a los santos con un énfasis en su ministerio, llamará normalmente a un compañero del clero – no a alguien de la congregación – para ocupar el púlpito mientras él no está.

Objeción 2: Lo mejor que produciría lo que ha sugerido sería un liderazgo incompetente en la iglesia, y lo peor una mutilación doctrinal.

Respuesta: Ésta es una acusación seria porque implica que el Espíritu Santo es incompetente al colocar los dones del liderazgo correctamente dentro del cuerpo de la iglesia. ¿Es la educación de un seminario lo que cualifica a un hombre para el liderazgo de la iglesia, o los dones del Espíritu? A menudo hemos sido culpables de dar servicio de labios a lo segundo, poniendo mayor peso sobre lo primero.

Objeción 3: La palabra “sobreveedor” (obispo) aparece en singular en 1 Timoteo 3:2 y en Tito 1:7 donde las cualidades del oficio son descritas. Esto sugiere por lo menos la posibilidad de que “sobreveedor” sea el oficio de un hombre. 

Respuesta: Es el uso más natural del lenguaje el emplear el singular cuando se están describiendo las cualidades de un oficio. Por ejemplo, puedo decir: “Un miembro del Parlamento o Congreso, (o aun, el miembro del Parlamento o Congreso) debe ser un hombre de integridad y honor, etc”, sin la mínima implicación de que haya un único miembro del Parlamento o Congreso, o que haya una limitación de uno por provincia. Recalcar el uso perfectamente explicable que hace Pablo del singular, ignorando la evidencia arrolladora del resto del Nuevo Testamento, sería una extraña exégesis. Una mirada más de cerca a Tito 1:5-7 descarta toda posibilidad de que Pablo fuera partidario del sistema unipastoral. ¿Cómo puede el uso de “sobreveedor” en singular en el versículo 7 tener la posible implicación de que cada congregación debe tener un solo sobreveedor, cuando dos versículos antes Pablo ha introducido el tema recordándole a Tito sus instrucciones para que “establecieses ancianos (plural) en cada ciudad”? A mi parecer, esto es conclusivo.

Objeción 4: ¿No estaban las “Epístolas Pastorales” dirigidas a individuos por separado?

Respuesta: Esta objeción está basada en el común concepto erróneo de que Timoteo y Tito eran “pastores” u obispos de iglesias locales. Esto, simplemente no es verdad. Veamos una cita del Zondervan Pictorial Bible Dictionary: “Aunque estas cartas sí que suministran instrucciones que merecen la pena para los pastores, no era a pastores a quienes estaban dirigidas en el sentido moderno del término. Más bien, estaban dirigidas a los enviados especiales de Pablo, para cumplir misiones específicas y a quienes se les confiaban tareas concretas según las necesidades del momento”.
continuará, d.v., en el siguiente número

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -